El principio fundamental de la elección libre para ver lo que uno quiere, debería primar en la realidad; pero si a uno le ponen 10 canales transmitiendo (basura; y no al mismo tiempo.. siendo optimistas) y solo uno que tiene imagen difusa, pobre escenografía, y mala calidad de sonido.. (pero con buen contenido); qué elige? o mejor dicho aún.. qué elecciones, racionalmente, traerían mayor variedad y opciones? La lamentable respuesta sería: la mayoría de canales.
Ese ha sido panorama de la televisión nacional desde hace mucho tiempo y la razón para que la frase "yo no veo tele nacional" haya sido cada vez más escuchada desde hace años. Las competencias desleales, las guerras de prestigio, los caprichos estúpidos de divas (y divos); y en general, los intereses creados es lo que vemos en realidad y no en los "reality". Y eso que no me refiero a la política nacional, que ahora usa el cuarto poder como un títere, todo sucio y percudido por haber pasado de mano en mano.
Es tan desagradable sentir como se manipula a conveniencia la conciencia del colectivo. Y sobretodo cuando se hace de una manera tan vulgar y tan burda; realmene llena el ambiente de pesimismo.
A manera de reacción, mi ingenuo raciocinio me hace querer ser optimista .. y solo haber sido manipulado de una manera sutil y más inteligente.
Definitivamente, el fenomeno del control de masas, es algo global; pero que acá se practica con nuestro toque nacional; con "creatividad", de manera "chicha". Me hace pensar que ahora eligiríamos a cualquier candidato presidencial de ser promocionado por Melcochita, Tongo o Susy Díaz.
Elegir a uno de ellos al congreso sería una verguenza y tambien; re-elección.
Para cambiar de compañia de telefonía celular no es necesario dos de ellos, solamente llamamos a uno, que pesa como dos. Y también podemos reirnos amelcochados de cosas cada vez más estupidas; chistes inteligentes? No, para que pensar tanto?!. Pégale a un maricón, vistete de mujer, pegale a la mujer, búrlate de quien no es como tú, bájate al que tiene éxito.. y confórmate; porque si sale en tantos canales; debe ser chistoso.
Para quienes tenemos cable, podemos ver cuáles son los hilos que mueven también la programación de otros paises. La diferencia es que con más poder y más dinero de estas televisoras podemos ver esta manipulación en alta definición. El embobamiento masivo que patentó MTV y que los politicos estadounidenses nunca pasaron por alto.. y hasta las inocentes sit-coms y distintas series que nos hacen olvidar que hay disfunciones en nuestras familias que no se resuelven en media hora. Inclusive programas "ácidos", "sin bandera" y supuestamente críticos de toda esta masificación son a veces contratados para desviar la mirada de asuntos más relevantes y que deberían ser de primera preocupación.
Claro que hay muy buenos programas que sólo buscan ser eso; y no responden a una agenda oculta. Documentales varios, sobre biografías, programas de análisis, o que muestran realidades que muchos de nosotros deberíamos conocer y ver .. aunque estén lejos, como bien dice la palabra: tele-visión.
Es cuestión de buscar y no conformarse. Ver más allá.
Desde que me pusieron cable, ya hace más de una década, hice el contraste de la programación nacional con otras: primero me estupidicé (y sigo estándolo con algunas series), pero tambien me di cuenta que la televisión de acá nos maneja como un rebaño de ovejas hipnotizadas, dopadas, y con tendencias suicidas a un barranco.
Solo me queda contar un par de anecdotas:
Anécdota de ayer: En un canal nacional, un programa periodístico: A un empresario de una cadena de restaurantes le descubrieron irregularidades con sus impuestos y una larga lista de falsas declaraciones ante la SUNAT de cuanto le pagaba a sus empleados (mucho menos del sueldo mínimo.. por años) y como no tuvo alegatos para defenderse, solo le quedo distraer a la conductora-periodista con temas irrelevantes y de manera muy torpe.
Anéctoda de hoy: (gota de bilis que rebalsó el balde) Ese mismo empresario, liderando un equipo de buenos samaritanos caminando con zapatillas Caterpillar en un asentamiento humano, demoliendo una casa de esteras para construirle una nueva a una señora que parecía necesitarla.
Y lo que la señora seguro se preguntaba es porqué era necesario salir en televisión.
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